Es imperioso para nuestra ciudad defender los más de 85 mil puestos de trabajo en el sector industrial que de forma sustancial contribuyen al dinamismo del resto de los sectores de la economía rosarina. Según denuncian desde la Federación Industrial de Santa Fe (FISFE), ya ha caído el 9% el nivel de actividad en la industria metalúrgica gracias a la apertura irrestricta de las importaciones dispuesta por el Gobierno Nacional.